Restos de un herbicida utilizado por la empresa biotecnologica Monsanto fueron encontrados en el organismo de ciudadanos en 18 países de Europa.El grupo ecológico y ambiental Amigos de la Tierra (Friends of the Earth, FoE) desarrolló un estudio en el que 44 por ciento de los voluntarios que participaron tenían la sustancia química conocida como glifosato en su orina.
Esta sustancia, creada para el control de plagas y eliminación del follaje, forma parte de los componentes del herbicida Roundup elaborado por Monsanto.
El plagicida es usado para descomponer amplias áreas de de cultivos genéticamente modificados. Al respecto, el vocero de FoE, David Sánchez, expresó que "nuestras pruebas indican que este herbicida está siendo usado en exceso".
Los “resultados sugieren que estamos expuestos al glifosato en nuestra vida cotidiana", agregó Sánchez.
Actualmente no hay estudios concluyentes sobre la forma en que el pesticida ingresó a la población estudiada ni a la población europea al que llegó el componente de Monsanto.
En cuanto a los efectos en el organismo, algunos científicos aseguran que la sustancia puede alterar el sistema hormonal humano, así como provocar daños en el ADN. En contraste, otro grupo de investigadores expresó que el glifosato no es tóxico.
El sondeo se publica en medio de la espera de la aprobación de 14 nuevos cultivos transgénicos que serán introducidos en Europa, los cuales serán tratados con el Roundup.
Asimismo, la investigación detalla que la proporción de muestras positivas varía entre los distintos Estados europeas.
Países como Malta lideran la lista de naciones en las que se encuentran altos trazos de glifosato con un 90 por ciento de muestras positivas entre sus voluntarios.
Las cifras colocan en segundo lugar a Alemania y el Reino Unido con un 70 por ciento
En un informe actualizado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) se informó sobre el riesgo de cáncer, la neurotoxicidad y defectos de nacimiento en los bebés, así como la irritación de los ojos, la piel y las vías respiratorias, causadas por la toxina.
Stephanie Seneff, investigadora del MIT aseveró que "Hemos encontrado algo muy importante que debe tomarse en serio y ser investigado a fondo", acotó.
Por su parte, el Instituto de Investigación Agrícola Rothamsted Research del Reino Unido , señaló que el informe del FoE es "poco fiable", "insustancial" y tiene "escaso valor científico".
La reacción contra el uso de semillas transgénicas perjudiciales para la salud ha rebasado las barreras internacionales.
En este sentido el pasado 25 de mayo se realizó la campaña mundial “grito mundial de NO a Monsanto” en donde más de 40 países de los cinco continentes participaron en una movilización que rechaza el uso de componentes agrícolas genéticamente manipulados.
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